¿Qué es lo que te pone? No lo sé.
Me lo preguntabas hace una semana y hoy, callejeando sin rumbo mientras dejamos pasar la hora antes de recoger a Little, pienso en esa pregunta. Nada inocente.
Busco una respuesta y no la encuentro. Solo sé lo que no me pone: los silencios, el desinterés con que finges escucharme, los monosílabos con los que respondes a mis preguntas, la ausencia de planes, las pelis de acción que llenan el cajón de las imágenes robadas. No me ponen. La frialdad con que le tratas a él. No hay excusa.
Callejeando llegamos al muro. Cae la noche. El cielo se ilumina rojizo sobre San Pedro, que destaca entre los nubarrones negros, amenazantes. El sol se resiste a ponerse. Algunas personas pasean por la orilla. La mar está batida. Qué cielo, te digo. Ambos sacamos nuestros móviles y tomamos una imagen de ese momento. El cielo, el mar, el horizonte. Al oeste, el sol, se resiste a ponerse.
Simplemente genial Esther. Conciso y brillante, sin florituras literarias y lleno de sentimiento, que es lo que verdaderamente hace a un escritor.
ResponderEliminar¿Puedo llevármelo a la sección Fotohistoria?
Pues eso, que sí, que te la lleves a donde quieras.
EliminarEnchantée!
PD: El contestador te echa de menos, está tan vacío desde que migré mi web que aún te echa más ;)
ResponderEliminarHola Eirc, la idea es esa, que te la lleves. A mí me resultaba más cómodo escribir la entrada en mi blog. Pero es toda tuya.
EliminarYo también echo de menos tu contestador, así que tendré que hacerte una visita.
:)